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Desde
que somos pequeños, en las escuelas, en los institutos, en los
libros aprendemos a cerca de esos pueblos que se revelaron contra los
tiranos de sus épocas para conseguirnos el “espléndido e
igualitario” mundo en el que vivimos, que no es más que una lucha
por el poder de uno o un colectivo contra el uno u colectivo
dominante.
El problema está en que esta lucha de poder solo ha sido accesible para los mismos, dejando al pueblo, a la inmensa mayoría fuera de estas cuya única función reside en que mantengamos su poder, hegemonía y desigualdades sociales cuanto más tiempo mejor.
El problema está en que esta lucha de poder solo ha sido accesible para los mismos, dejando al pueblo, a la inmensa mayoría fuera de estas cuya única función reside en que mantengamos su poder, hegemonía y desigualdades sociales cuanto más tiempo mejor.
Si
bien desde el principio de los tiempos podemos ver como millones de
personas han muerto en guerras luchando por la “libertad”. ¿La
libertad de qué? ¿La libertad que te de un señor, rey, noble o
banquero frente a la que te quiera dar el otro? ¿La libertad de
elegir el color y la forma de tus grilletes? ¿La
libertad de decidir si quieres ser el pienso del ganado o el ganado
del amo?
Vayamos
a ejemplos concretos:
- La caída del antiguo régimen provocada por una burguesía de poder creciente en la época, que solo pudo conseguir gracias a engañar al pueblo con motivadoras consignas y reivindicaciones que fueron instantáneamente destruidas una vez llegaron al poder los burgueses imperialistas.
- Fue en ese momento en el que la nobleza y la familia real pasaron de estar en el primer peldaño a muchos, tener que aceptar su derrota y trabajar a favor de esa burguesía que creció hasta tener un poder ilimitado en el tiempo, ya que no depende de líneas de sangre, si no del capital financiero e influencias acumuladas.
El
auge de los totalitarismos en el siglo XX se traduce en otro
grupo de poder rebelándose contra el actual líder usando como armas
al pueblo, un pueblo que ansiaba libertad y que creyeron (una vez
más) poder conseguirla.
El
resultado distó mucho de la realidad... los cálculos de víctimas
solo de la segunda guerra mundial oscilan entre 25
y 100 millones de muertos, ojo, no del bando Aliado, ni
liberalista, ni nazi ni como lo queráis llamar, así es como siempre
han querido que lo llamemos, pero en realidad las
bajas siempre han sido las mismas, LAS DEL PUEBLO.
Cuando
hay cambios sociales el pueblo siempre es el que causa el fin, su
propia esclavitud.
Desde
que nacemos se nos programa para esto y aquello. Las series
familiares de televisión con las que crecen te
dan la imagen de cómo tiene que ser una familia, de como no
tiene que serla, de topicazos y costumbres sociales que en la serie
los personajes comprenden totalmente y dan como universales,
programando así al espectador. Entonces es cuando, una vez que te
han vendido tu estilo de vida, te meten los
anuncios, te dicen qué debes comprar para ser como la gente que has
estado viendo en esos programas, qué es lo mejor para tí,
qué es lo que todo el mundo, y por tanto, tú también quieres...
qué debes consumir, qué debes escuchar, por qué película tienes
que dejar que te atraquen 10€, por qué lugar donde vivir vas a ser
esclavo del banco (y de qué banco) toda tu vida...
¿TRANSICIÓN O
TRANSACCIÓN ESPAÑOLA?
La
transición española, ese momento en el que la gente creyó que
dejaría de estar esclavizada, que tendría algún tipo de poder en
sus vidas.
El
país tenía esperanzas de libertad y cambio bajo promesas de
igualdad y democracia. Los 80, esos años de desmadre español que no
fue más que algo planificado para apaciguar al pueblo unos años y
así preparar sus planes de gobierno mundial.
España
ya había sido vendida al Nuevo Orden Mundial, como ha pasado con la
URSS, Irak, Libia, Corea del Sur... y pasará con demás países en los que hay un
sistema o persona que quiere que su país sea independiente a la
dictadura económica mundial. Llegan, utilizan los medios de
desinformación necesarios para que ese gobierno caiga y prometen
democracia y poder para el pueblo, que no será otra cosa entre una
decisión blanco-negro en unas urnas que ya han sido compradas, pues
no importa qué facción salga elegida, ya que es el gobierno mundial
quien controlará a estas facciones.
En
el caso de salir una opción que no les guste siempre pueden volver a
manipular la opinión pública, corromper o amenazar de muerte a los
que no se sometan.
En
el caso de españa no hubo falta guerras ni intervenciones militares,
había formas más sencillas de llevar al país al punto en el que
nos encontramos ahora, que es donde siempre lo han querido tener.
Escudo de la familia |
Una
de las familias reales más antiguas, masonas y ambiciosas de Europa.
Parentescos:
Emperadores Alemanes, Familia del Zar de Rusia, Reina Victoria y
Familia de gran bretaña, Familia real de Dinamarca (Glucksburg),
Reyes de Grecia... entre otras.
Familias
que entre otras han tenido tratos con otras líneas de sangre como
los Rothschild.
Saxe
Coburg Gotha Schleisweth, Holdstein, Hannover, Romanov, Cassel
Hessel.
Formas
tan sutiles como la entrada de una mujer Griega, Sofía, a la casa
real. ¿Sofía? Pensaremos... miembro y simpatizante de sociedades
secretas tan importantes en la gran pirámide social como es el Club
Bildelberg (del que hablaré detalladamente dentro de unos días). A
nadie le parece extraño que un hombre como Juan Carlos de Borbón,
lleve años en el ránking de la famosa revista Forbes por ser una de
las personas más ricas del mundo?.
Españoles que han asistido al Bildelberg |
Ha
habido filtraciones y medios independientes que se han atrevido a
hablar de las misivas reales enviadas por el Rey a países árabes
solicitando (y posteriormente recibiendo) millones de euros, ingresos
de gente como Ruiz Mateos incluso...
Curiosamente
este año el Rey ha sido eliminado de dicho ránking, coincidiendo
con el escándalo Urdangarín y la “caza” de elefantes.
¿Salpicará al Rey este asunto también o a caso estamos hablando de
algo más gordo y lo de Urdangarín solo es una pequeña parte que
casi han querido que descubramos para evitar que pensemos en gente
con cargos más... altos?
Y yo
me pregunto... ¿De la seguridad de quién?
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